El centrocampista de la Real Sociedad Antoine Griezmann ha conseguido, con su gol al Barcelona, la ansiada reconciliación con una afición molesta por sus devaneos con el Atlético de Madrid y se erige como el emblema de una Real de acento francés.
Precisamente ante el conjunto azulgrana los donostiarras contaron con una presencia gala desconocida en San Sebastián, con hasta tres jugadores del país vecino jugando simultáneamente en la segunda mitad, cuando se produjo la gran reacción de los blanquiazules para protagonizar la sorpresa de la jornada.
En el campo estaban, junto al joven talento de Macon, el centrocampista David Zurutuza, natural de Rochefort y que tiene doble nacionalidad hispano-francesa, y otro nuevo producto de la cantera como Liassine Cadamuro.
Se da la circunstancia que en el banquillo el francés es uno de los idiomas oficiales porque tanto Philippe Montanier como su segundo Michel Troin son galos, lo que ha supuesto la mayor representación de fútbol del país vecino en la historia de los guipuzcoanos...
No hay comentarios:
Publicar un comentario